Más que un destino; es una experiencia de vida. Desde su arquitectura hasta cada una de sus experiencias, todo está diseñado con atención al detalle. Inspirado en la biodiversidad y la majestuosidad natural de su entorno, ofrece un servicio único.
La marca busca crear un refugio exclusivo donde los huéspedes puedan reconectarse con la naturaleza y encontrar serenidad en medio del entorno natural, sin renunciar al lujo. Es un espacio para compartir con personas de intereses similares.
Tzinacan actúa como un anfitrión cálido y atento, guiando a sus huéspedes a través de experiencias sensoriales que incluyen cenas gourmet, actividades al aire libre, sesiones de bienestar y un área de negocios. Cada experiencia está pensada para dejar una huella duradera en el tiempo.